"El tren de la vida"

Este viaje comienza en el momento que nacemos, ahí es cuando empieza a formarse nuestro tren y nuestro camino. Él nos acompañará a lo largo de toda nuestra vida hasta llegar a formar nuestra historia.
A medida que vamos creciendo el tren va modificándose a la vez que nuestro cerebro, y nuestros sentimientos es lo que le va dando color.
A lo largo del trayecto van apareciendo personas, algunas se quedan, otras se van, pero nunca deberíamos parar el tren para esperar a que una persona se suba, si de verdad quiere formar parte de tu historia, si en ese momento no se subió quizás sea porque su tren esté llevando en ese momento otro rumbo y quizás dentro de un tiempo sea el momento de encarrilar los dos trenes juntos.
Al igual deberíamos valorar cuando una persona para ese tren para dedicarnos su tiempo porque es algo que no recuperará jamás.
Habrá personas  de todo tipo, de las cuales tendremos que aprender, tendremos que escoger si se quedan o no dentro de ese tren, no porque alguien llegue a tu vida tiene que quedarse, a veces tendremos que dejarle en una parada y que continúe su camino, en algunas ocasiones nos dolerá, y otras será un alivio
En este camino sufriremos mucho, y hasta a veces pensaremos que nuestro tren se ha parado de tanto daño, pero no, el tren nunca se para, a veces va más lento porque necesita coger fuerzas. Y esos daños, algunos serán tan profundos que dejarán alguna magulladura para todo el trayecto, pero tendremos que aprender a vivir con ella hasta que llegue a formar parte de la historia, pero también habrá daños que lo que harán será reforzarlo, e incluso otros nos harán avanzar varias paradas.
También aparecerán momentos que nuestro tren no sabrá por que camino seguir, pero tendremos que ayudarle, frenar un poco, tomarnos nuestro tiempo, y decidir, a veces implicará arriesgarse, otras tomar el camino más cómodo u otras tomaremos la decisión pensando que es lo mejor para nosotros.
Al final, lo que este tren está haciendo no es solo surcando nuestro camino, también está creándonos a nosotros mismos haciendo de nuestro viaje nuestra historia, única e irreemplazable.



Comentarios

Entradas populares de este blog

El mundo de los que te cambian sin querer cambiarte

La ironía de la Navidad

Constelación de "las Pléyades"